Trusting Lover - Capítulo 14

Rhage gruñó al recobrar la consciencia. Estaba en una cama, no en una cueva, y tenía calor, no frio. Tenía un dolor de cabeza de mil demonios y el dolor de sus huesos era espantoso. ¿Qué coño le había pasado?

- ¡Hollywood! Bienvenido al mundo de los vivos.

Dios que dolor...

- V, ¡cállate! ¿Quieres?

- Toma bebe, es un alka-seltzer.

Rhage agradeció el medicamento y se recostó en la cama gruñendo por el dolor.

- Rhage, ¿qué te ha pasado?

El tono de Butch era más amable y silencioso que el de V, pero a Rhage no le apetecía hablar. Las cosas que había vivido con Lohrena... el dolor que sintió después... Era demasiado y no quería recordar. Había tenido tantas esperanzas... Lohrena como su Shellan, su vientre creciendo con un hijo suyo... La idea de tener que volver a su vida de siempre, de peleas y sexo anónimo solo para mantener al dragón tranquilo, le daba nauseas.

- Quiero volver a la mansión.

- Aun no. Tienes que recuperarte. Wrath está furioso contigo. ¿Quieres practicar lo que le vas a decir? Habla conmigo.

- Vete a la mierda V.

Rhage suspiró profundamente, oliendo el humo del cigarrillo de V. Abrió los ojos y lo miró directamente.

- Te equivocaste con tu visión hermano. Lohrena no puede tener hijos.

*-*-*-*-*-*

Al día siguiente Rhage estaba mucho mejor y volvieron a la mansión. La noche anterior V solo le había respondido con un "yo nunca me equivoco", y él lo había mandado a la mierda.

Fue directamente a la oficina de Wrath, deseando poder ignorarlo y encerrarse en su habitación. La puerta se abrió antes de que el llamara y se volvió a cerrar detrás de él cuándo entró.

- ¿Me quieres explicar qué coño estabas pensando y que demonios te ha pasado?

- Mi rey... yo...

- No pongas a prueba mi paciencia Rhage. Habla.

- Pase por mi necesidad. Lohrena me ayudó. Pensé en traerla aquí como mi Shellan pero me rechazó, después de decirme que no puede tener hijos.

Wrath se quedó callado, obviamente sorprendido por el olor ácido de su dolor.

- ¿Que paso en las montañas Rhage?

El tono de Wrath se había suavizado considerablemente.

- Perdí el control. No volverá a pasar.

- Te han grabado.

- Si, Butch y V me lo han comentado.

- Has puesto a la Hermandad en peligro.

- Soy consciente de ello. No puedo hacer nada al respecto, pero como he dicho, no volverá a pasar. Al menos que sea necesario cuando estemos luchando contra los antis, pero en ese caso, tenemos el mhis, así que...

Wrath asintió suspirando.

- No puedo hacer que no luches por lo de tu maldición, pero como vuelva a pasar, no me quedara más remedio, ¿me entiendes?

Rhage asintió.

- Esta bien, puedes marcharte.

Rhage estaba ya en la puerta cuando el rey habló.

- Rhage, ¿estás seguro de que no está embarazada?

- Seguro mi rey, ella misma me lo dijo. Lohrena no puede tener hijos.

*-*-*-*-*-*--*

Lohrena estaba en el Aeropuerto de Nueva York, billete en mano. Destino: Versalles, Francia. Tenía un Château allí que pertenecía a su familia desde 1816. Se refugiaría allí durante un tiempo, rezando a la Virgen Escriba por que le ayudara a sacarse a Rhage de la cabeza de una vez por todas.