Lover Submissive - Capítulo 40

Butch se metió en la habitación de Lohrena deseando que V no entrara también. Kihara le había pedido disculpas por la interrupción y asegurado que no se lo diría a nadie. Sin embargo, era demasiado tarde, el daño estaba hecho. Se sentía avergonzado, humillado, aunque no estaba muy seguro del porqué. Se había sentido bien con V, con todo lo que habían hecho... entonces... 

- ¿Problemas en el paraíso?

Lohrena lo miraba traviesa desde su cárcel, claramente disfrutando de su dolor. 

- Vete a la mierda Lori.

- Mmmm que te pasa Brian, ¿el perrillas no te da lo que necesitas? Si quieres puedes probar conmigo. Prometo no morder...

Butch se echó un Lag y la miró con los ojos entrecerrados. Podía entrar en la jaula y encerrarlos a los dos, desfogarse con ella y... lo malo era que para sacarle, haría falta otra persona y entonces se sabría lo que había hecho... ¿Pero qué demonios estaba pensando? No quería estar con ella. Quería olvidarse de lo que sentía por V. No podía hacer eso con su posible enemiga… Claro que también estaba el hecho de que por mucho que quisiera, y por muy sexy que se vistiera, Lohrena no le ponía duro.

- No gracias nena.

- Tú te lo pierdes.

***

Lohrena paseo de un lado a otro en la habitación, se estaba volviendo loca. ¡Necesitaba alimentarse y necesitaba ser libre! 

¡Malditos hermanos! Tenía razones de sobra para odiarlos y cada vez más. Pero jamás se lo diría a ellos. Nunca averiguarían la razón de su odio. Miro a Brian, parecía dolido y no paraba de beber. Sonrió. Brian parecía el más débil de todos los que había visto hasta el momento y si seguía bebiendo así, igual se podía aprovechar de ello.

- ¿Brian?

- ¿Qué?

- Tengo hambre.

- ¿Qué quieres, un sándwich, una ensalada...?

- No ese tipo de hambre.

Brian la miró con una ceja levantada.

- ¿Te crees que soy tonto?

Sonrió.

- Nena, dime lo que quiero saber y te doy toda la sangre que quieras.