jueves, 2 de octubre de 2014

Lover Defeated - Capítulo 7

Hope salió de allí  en cuanto pudo. El segundo en el que había lamido la sangre de su labio herido se había dado cuenta de lo hambrienta que estaba. Ella casi se derritió cuando él le ofreció su vena, dándose cuenta de que realmente era un macho de valía.
Él la había defendido de Vix, le había ofrecido su vena.
Y la llamaba cara. El apelativo sonaba tan... bien.
Habría dado cualquier cosa por haber podido alimentarse de él.
Hope agarró su vientre mientras caminaba desde el vestuario masculino a su propio vestuario, todavía empapada de estar en la ducha con Elvar.
Sólo esperaba que nadie la viera así.
- ¿Hope?
¡Maldita sea!
Ella se dio la vuelta.
- Hey Blax. ¿Qué estás haciendo?
- Eso debería preguntártelo yo a ti, ¿no crees? ¿Qué demonios te ha pasado? Pareces un gato ahogado.
Ella sonrió.
- Me siento como un gato ahogado. Ahora, si me disculpas...
Se apretó más la barriga cuando una nueva ola de hambre la recorrió.
Mierda.
Tendría que haber llamado a Khalos, para alimentarse, pero a ella no le gustaba todo el proceso. Llamarlo para fijar una cita, tener a su padre y a su mahmen ahí supervisando todo el asunto...
Muy aburrido, todo.
La mirada inteligente de Blax se fijó en su vientre.
Apretó la mandíbula y la guio hacia el vestuario femenino.
- ¿Te has vuelto loca? ¿Cuándo es la última vez que te alimentaste?
- No me acuerdo.
- ¿No lo puedes... no te puedes acordar? Hope, sabes lo importante que es para los de nuestra raza alimentarnos regularmente. Tú más aún, debido a todos los entrenamientos y  la lucha. Necesita la energía y los nutrientes que la sangre de un macho te proporcionan.
Se arremangó la manga y acerco su muñeca a la boca de ella.
- A beber.
- ¡No!
- Hope, vamos, no seas una cría. Bebe.
Ella negó con la cabeza. De ninguna manera iba a alimentarse del hermano de Mariah. Eso sería... raro.
- ¿Quieres que vaya a avisar a tu padre?
Ella entrecerró los ojos.
- ¿Por qué no estás en tu clínica?
Blaxton puso los ojos en blanco.
- Sólo vine a visitar a mi hermana. La clínica está bien sin mí durante una hora o dos. ¿Ahora, vas a alimentarte?
Sus colmillos se habían alargado y estaba muy, muy hambrienta, pero esto estaba mal de algún modo. Como si ella estuviera engañando a Elvar. Lo que por supuesto era ridículo, porque no estaban realmente juntos.
- Sólo vete Blax, ¿por favor?
- No hasta que te alimentes.
Mantuvo su muñeca cerca de su boca y sus colmillos palpitaron.
- Mira, alimenté a Nalla en el pasado, ¿recuerdas? No es nada sexual. Sólo estas tomando algo que necesitas. Y es muy obvio que te estas muriendo de hambre.
Aun así dudo.
- Hope, no estás vinculada a nadie, ni yo tampoco.
Blax estaba en lo cierto. Además, le ahorraba la molestia de tener que llamar al otro macho del que normalmente se alimentaba.
- Está bien, muchas gracias por tu vena.
Hope le agarró la muñeca y mordió con fuerza. Él siseó cuando ella empezó a chupar suavemente, y Hope hizo lo posible por no gemir al notar su sabor.
Su sangre era como un rico vino tinto, dulce con un toque de especias, y ella bebió con avidez.
- Hope, ¿ya terminaste? ¡Llegas tarde a la noche de chicas!
Ella levantó la vista de la muñeca de Blaxton cuando la voz cantarina de Janie se escuchó a través de la puerta antes de que esta se abriera. La ahora morada melena de su amiga, apareció ante ellos y se quedó bloqueada mirándoles, sorprendida

- Oh. Yo... siento interrumpir.
Janie se dio la vuelta y se alejó mientras Blaxton maldijo, soltándose el brazo y sellando el mismo sus heridas.
- Mierda, tengo que... tengo que... Mierda.
La mirada desesperada en sus ojos era desgarradora y Hope se sintió fatal por aceptar su oferta.
- ¡Janie! Janie, espera puedo explicártelo...
Oyó como Blax iba detrás de su amiga y cerró los ojos. Probablemente debería ir detrás de su amiga ella misma, pero estaba demasiado avergonzada para tan siquiera mirarla. La NDC (noche de chicas) había sido la última cosa en su mente después de lo que había sucedido con Elvar.
Como si lo hubiese conjurado, su aroma le lleno la nariz y ella suspiró, limpiándose la sangre de Blax de sus labios.
Un gruñido suave pero amenazador llenó la habitación, y ella inmediatamente lo reconoció.
- Te. Has. Alimentado. De. Él.

* - * - * - *

Elvar iba a matar esta noche.
Lo sabía con la misma seguridad que sabía que jamás se olvidaría de Hope lamiendo la sangre de otro macho de sus labios.
- Elvar, fue sólo... sólo... yo necesitaba alimentarme.
Ella terminó su frase sin convicción. Como si pensara que lo que había hecho estaba mal.
Qué no lo estaba, le recordó la voz racional en su mente. Ella necesitaba alimentarse igual que él. Infiernos, él se había alimentado de Sophira justo antes de venir a la fiesta que habían dado en honor a Rhage. No tenía derechos sobre esta hembra; ella podía alimentarse de quien ella quisiera.
¡Mía!
El macho vinculado en él gruñó y Elvar cerró los ojos, sintiendo las dos mitades de él en duelo.
- ¿No pensaste que yo vendría aquí para encargarme de tus necesidades?
Ella miró hacia abajo.
- Yo... yo no lo sabía. ¿Cómo podría?
- ¡Porque soy tu maldito macho, y lo sabes!
Sus ojos lo miraron sorprendidos.
- Maldita sea Hope, puede que no estemos vinculados pero sabes tan bien como yo que soy tuyo para hacer lo que quieras conmigo. Me encargare de tus necesidades ahora y siempre. Cualquier cosa, lo que sea que necesites, puedes pedírmelo.
Ella no lo miraba y Elvar odiaba eso. No le estaba mostrando la actitud a la que lo tenía acostumbrado. Parte de él se preguntó si era por lo que Vix le hizo o si era todo por causa de él.
- ¿Sabes lo que me hizo verte besar a ese imbécil?
- ¡Yo no lo estaba besando!
Ahí estaba esa chispa.
- Lo hubiera matado si Blay no me hubiese detenido.
- Lo sé.
- ¿Qué diablos crees que le voy a hacer al macho del que te acabas de alimentar? ¿Eh?
Él agarró su barbilla entre sus dedos.
- ¿Eh? Respóndeme.
Ella se soltó de su agarre.
- ¿Crees que ha sido la primera vez que me alimento? ¿Crees que Vix me acaba de dar mi primer beso?
Soltó un bufido.
- Joder, probablemente piensas que aun sigo siendo una Newling, ¿no?
Hope no esperó su respuesta.
- No eres mi dueño, Elvar. No me importa que derechos crees que has obtenido al vincularte a mí, pero tú no eres mi dueño. Si yo quiero alimentarme de 10 machos diferentes, entonces voy a alimentarme de 10 machos diferentes. Si quiero besar a 20 de ellos, eso es exactamente lo que haré. Y si quiero pasarme el resto de mi vida follándome a cada macho que encuentre, puedes apostar tu culo que esta hembra va a ser follada bien y duro porque, ¿Elvar nene? No. Te. Pertenezco. Ni ahora, ni nunca.
Ella le dio en la sien con el dedo.
- Así que metete eso en tu dura cabeza, y que no se te olvide.
Elvar sentía como la ira hervía en su interior.
- Estás tan, tan equivocada. Fuiste mía desde el segundo en el que pateaste mi culo en el gimnasio, y tú seguirás siendo mía de aquí en adelante.
Ella arqueó las cejas.
- Tienes que estar bromeando. ¿Quién demonios te crees que eres?
- Soy tu futuro hellren.
Ella soltó un bufido.
- Así que escucha esto, Hope. La próxima vez que necesites alimentarte, vendrás a mí. La próxima vez que quieres que te besen, tú vienes a mí. Y la próxima vez que quieres que te follen bien y duro. Vendrás. A. Mi. ¿Me estás entendiendo?
Hope puso los ojos en blanco. A pesar de que aún estaba empapada por la ducha de antes, ella estaba preciosa para él.
- Ya, no lo creo, Elvy, chico.
Él sonrió cuando escuchó que ella lo llamaba por el apodo que Vix le había dado.
Elvar se acercó a ella y le puso la mano en la cabeza, agarrando el cabello sin lastimarla. La necesitaba cerca de él. A pesar de que su aliento aun olía a la sangre de otro macho.
- Hope. Cara mía. Deja de luchar contra esto. Tú me deseas. Puedo oler lo mucho que me deseas. Es como si este vestuario estuviera lleno de Magnolias.
Se inclinó e inhaló cerca de su cuello.
- Apuesto a que, si meto mi mano en tus pantalones empapados, te voy a encontrar mojada, pero no por la ducha que te diste conmigo. Ni por el macho del que te acabas de alimentar.
- Estas delirando.
- Puede ser. Pero me deseas tanto como yo te deseo a ti.
Puso su otro brazo detrás de la espalda de ella y él la abrazó mientras se adueñó de su boca, sin importarle que otros labios la hubieran besado. Que otro la había alimentado.
Profundizó el beso, reclamándola, adueñándose de ella, y ella le devolvía cada lametazo con la misma intensidad. Su lengua luchando con la suya.
Las manos de Hope se enterraron en su cabello, sosteniéndolo cerca de ella, profundizando el beso y deseando tomar el control. Elvar no la dejó.
La besó hasta que desapareció el sabor de los otros machos, sólo saboreándola a ella.
Algún día, encontraría al macho que la había alimentado. Y entonces... Elvar dejaría claro que ella le pertenecía.

4 comentarios:

  1. Uuuff que lío mas grande se va a armar...
    Amo a Elvar!!!!!!

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  2. Es que.. es un sufrimiento cuando terminan así los capítulos siempre se quiere massss!! Que pareja .. muero por seguir leyendo.. que días se suben capítulos??

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    Respuestas
    1. Los jueves y los domingos ;p
      Hoy tocaaaaa!!

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    2. Sip, esos días - y si no publico es porque realmente no he podido (por trabajo o falta de tiempo)

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